Sebastián Valdenegro
“Optimista” se declara el director del Programa Económico del Instituto Libertad y Desarrollo (LyD), Ricardo Matte, sobre el escenario tanto externo como interno. Globalmente, destaca la recuperación de la confianza de los consumidores en EE.UU., que está en niveles previos a la crisis. “Los gerentes de compra a nivel mundial están bastante optimistas”, señala.
Sin embargo, dice que hay “varias interrogantes” en Chile y el mundo hoy. El aumento en los precios del petróleo, la energía y los alimentos son fenómenos que no pueden pasarse por alto, señala, dado que “revelan que se puede estar optimista, pero hay campanas de alerta que hay que monitorear. Hay gente que está hablando del comienzo de un relativo estancamiento de la economía mundial con inflación, aunque no es la mayoría. La probabilidad no es alta en este minuto, pero se debe considerar porque estos procesos se producen repentinamente y el escenario puede cambiar”.
En este sentido, hace un llamado a moderar el gasto fiscal durante 2011 para evitar desequilibrios ante la volatilidad del mapa económico global.
- ¿Cómo recibió el aumento del gasto fiscal en diciembre?
- Esto alteró algunos precios clave para el equilibrio macro. El mercado dijo el gasto fiscal excesivo, en cierta manera poco razonable que hubo en diciembre, es muy sorprendente. El fisco tuvo una política claramente anticíclica y el mercado se vio tremendamente sorprendido, se dio cuenta de que para tener equilibrio se requiere un dólar más bajo y una tasa de interés más alta. A esto se le agrega el shock del petróleo, que genera mayores posibilidades de inflación.
- ¿Qué debe hacer el fisco?
- El ministro de Hacienda dijo hace poco que la política fiscal contribuirá a evitar presiones inflacionarias. Creo que el fisco debe aplicar un ajuste. El escenario actual amerita que el fisco haga algo, con o sin alza del petróleo, como medida mínima de cautela, y que colabore con el Banco Central.
- ¿Falta coordinación allí?
- Sin tener todos los antecedentes, ni saber cómo ha sido hasta ahora, para situaciones complejas como esta lo que uno siempre puede pedir es mucha coordinación, esto hay que enfrentarlo juntos. El fisco necesita colaborar y va a ser bueno que lo haga por dos razones: ayudará a que la tasa de interés no tenga que subir tanto, y generará una presión de tipo de cambio real, dando una señal de que la economía se mantendrá relativamente estable. Es muy importante una colaboración hoy del gobierno en términos de hacer una reserva de gastos por prudencia.
- Pero este año habrán gastos por proyectos emblemáticos del Ejecutivo...
- Está bien, tienen muchos compromisos de gasto que se intensificarán ahora. Entonces, si no quieren anunciar un recorte del presupuesto, yo sería bien práctico y haría una reserva de gastos de US$ 800 millones, por ejemplo, como una señal. Y si es necesario, hacer una reserva adicional. En el fondo, que el crecimiento de 5,5% no sea a todo evento, sino que esté condicionado a que los equilibrios macroeconómicos lo aconsejen. Si hay holguras, nos gastamos la plata y hacemos que igual el gasto crezca menos que el Producto.
- ¿Hay holguras?
- Dadas las circunstancias y lo ocurrido en diciembre, el fisco tiene que ser contracíclico y ayudar ahora: 5,5% de gasto versus 5,8% de PIB es un poco excesivo, dado además el escenario de inflación alta. Lo que yo haría es dar una señal, idealmente, de reducción de presupuesto, aunque sea difícil. Hacer una reserva de gastos puede ser muy interesante, ir evaluando si cierto nivel de gasto se puede ejecutar. Esto va en la línea de la prudencia, de manejarse en escenarios que no conocemos de manera más conservadora. La regla número uno es que se debe ser muy conservador.
- ¿No ve difícil ser conservador cuando hay proyectos de alto costo fiscal para este año, como el post natal y la eliminación del 7% a los jubilados?
- Hay un dilema complejo para el ministro de Hacienda, tiene que hacer cuadrar todo esto y,ojalá, hacer una racionalización muy importante de en qué cosas gastar porque tiene que ser lo más eficiente posible.
- ¿Qué debería hacer el ministro Larraín?
- Creo que hay que ser muy prudente y moderado en algunas cosas. Las cosas cambiaron, aunque el escenario para Chile sigue siendo positivo. El gobierno lo está haciendo bien en términos de manejo macroeconómico, pero me gustaría mucha coordinación con el Banco Central. Deben estar muy al tanto de lo que está haciendo el uno y el otro. Ellos pueden decir que están muy coordinados, pero en el fondo a mí me sorprende un poco estas cifras de expansión fiscal. Yo recomendé como miembro del Grupo de Política Monetaria subir 0,25 la tasa en enero, pero si hubiera sabido que iba a crecer tanto el gasto público…
- ¿Qué otras medidas de austeridad debiera tomar Hacienda?
- Lo importante es recortar gastos, ya que daría una señal al mercado de que el fisco realmente va a colaborar. También tener un gasto de calidad. Lo más realista hoy día es pedir que el gasto se ejecute con eficiencia. Gastarse ese porcentaje tan grande en un mes no te garantiza haberlo hecho eficientemente.