Tras el fallecimiento del empresario Ricardo Claro Valdés, ocurrido esta madrugada a causa de un infarto cardíaco, una de las personas que se refirió a su vida y que llegó hasta la casa de Ricardo Claro fue el presbítero Luis Eugenio Silva.
"Nosotros los creyentes pensamos que en el momento que uno está preparado, Dios lo llama. Y si Ricardo se murió así, en la madrugada, es porque Dios lo llamaba", señaló.
Agregó que "una muerte tan sorpresiva siempre produce terror, angustia (...) María Luisa, su señora, es una mujer de profunda fe y por consiguiente está con la resignación y la pena, terrible, de perder a su marido, pero está serena y tranquila", afirmó.
El padre Luis Eugenio Silva es amigo de la familia, y es quien en estos momentos está acompañando a la familia.