La Corte Suprema ratificó las sanciones impuestas por la SVS en contra Hans y Eugenio Eben, Vicente Aresti y Alejandro Irarrázabal por el caso del uso de información privilegiada en la fallida fusión entre D&S y Falabella en mayo de 2007.
En el escrito de 22 páginas se señala, entre otras cosas, que Hans Eben Oyanedel, quien en ese entonces era director de D&S, tuvo acceso a información privilegiada relativa a las negociaciones de fusión entre ambas empresas y a su avance, y "no respetó los deberes de reserva y de no transmisión de información privilegiada que sobre él pesaban".
Cabe señalar que Eben fue multado por la SVS en julio de 2008 con UF 400, monto que pagó.
En otros pasajes del fallo se detalla que antes del anuncio de fusión, las acciones de D&S se transaban a un precio promedio de $230 por unidad, "valor al que los recurrentes las adquirieron, en tanto que después de anunciada la fusión éste se elevó a $280, precio promedio que se observó en la venta de acciones efectuada el 18 de mayo de 2007 por los reclamantes".
En el documento se señala además que "las negociaciones fundamentales" se llevaron a cabo en un brevísimo lapso de tiempo.
Respecto a las relaciones de los implicados, el fallo de la Suprema consigna que en esa época Vicente Aresti tenía la calidad de Vicepresidente Ejecutivo de Empresas Tucapel S.A. y Hans. Eben era director de la misma.
Adicionalmente, señala que en esa época Alejandro Irarrázabal Ureta ejercía el cargo de Gerente General de Empresas Tucapel y que Eugenio Eben Aresti era Gerente de Nuevos Negocios de la misma compañía.
"Entre los reclamantes existen evidentes relaciones de familia y sociales de relevancia, sin perjuicio de las profesionales y comerciales ya descritas", consigna la Suprema.
El documento revela que se produjo "un cambio relevante en el patrón de conducta" de inversión de Aresti, Irarrázabal Ureta y Eben Aresti en el mercado de valores, relativo a la compra de acciones de D&S.
En esa línea, el documento emitido por el máximo tribunal del país sostiene que éstos adquirieron un número apreciable de acciones de D&S "a través de sociedades de su control y de la cónyuge de uno de ellos, conducta que con anterioridad a esa fecha no se había observado en ellas".
"Dichas personas procedieron a vender rápidamente una gran cantidad de aquellas acciones, verificándose un número trascendente de operaciones de venta de las mismas el 18 de mayo de 2007, esto es, un día después de que Falabella y D&S anunciaran públicamente su acuerdo de fusión, obteniéndose por parte de los recurrentes ganancias de tales actuaciones", dijo el escrito.