El invierno 2024 fue tildado por algunas aerolíneas como el peor del último tiempo. ¿La razón? A juicio de la industria, los aeropuertos del país enfrentaron desafíos operacionales producto de condiciones meteorológicas complejas, siendo los más afectados los terminales aéreos de Copiapó, La Serena, Osorno, Puerto Montt, Valdivia, Balmaceda y Punta Arenas.
US$ 7.900 millones aporta la industria de aviación comercial al PIB.
De acuerdo a la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) y la Asociación Chilena de Líneas Aéreas (Achila) la principal causa de cancelaciones en los vuelos programados este 2025 sigue siendo la falta de tecnología que les permita aterrizajes en condiciones de baja visibilidad, debido a la falta de una modernización en sistema de aterrizaje instrumental o ILS (por sus siglas en inglés, Instrument Landing System).
Desde los gremios -en una respuesta conjunta- señalaron que “invertir en infraestructura aeroportuaria, en un país con las condiciones geográficas como el nuestro, siempre será un beneficio para la conectividad aérea y el desarrollo económico, social y turístico nacional”.

En esa línea, las entidades insistieron que “el mejoramiento, ampliación y modernización de la infraestructura aeroportuaria del país deberían ser considerados prioritarios por el Estado, ya que se trata de una infraestructura crítica”.
De acuerdo a datos entregados por Latam, actualmente la aviación comercial aporta más de US$ 7.900 millones al PIB y genera casi 212 mil empleos, siendo además “un facilitador clave para industrias como el turismo, la logística y el comercio exterior”.
Ambos gremios señalaron que “definitivamente el año pasado fue complejo para la industria (...) Por ello hemos planteado la necesidad de modernizar los diferentes terminales aéreos del país, lo cual esperamos se materialice lo antes posible en la totalidad de los aeropuertos y reducir las cancelaciones y modificaciones en los vuelos debido a condiciones meteorológicas”.
Vuelos cancelados
De acuerdo a información entregada por cada una de las aerolíneas, los datos de mayor afectación de sus operaciones del último tiempo corresponden al período de invierno 2024, debido a las condiciones climáticas adversas.
Según Latam, el año pasado, 677 de sus vuelos fueron afectados (cancelados y/o demorados) por este problema, impactando a 99.112 pasajeros.
A su vez, JetSmart indicó que el Aeropuerto de La Florida, en la región de Coquimbo, concentró el 55% de sus cancelaciones en 2024.
Por su parte, Sky Airline indicó que durante el lapso entre mayo-agosto de 2024, registró 157 vuelos cancelados debido a las malas condiciones meteorológicas y que los aeropuertos donde más reportó afectaciones fueron los de La Serena y Puerto Montt, con 51 vuelos cancelados en estos destinos.
De hecho, señaló que en Puerto Montt, la situación se intensificó a partir de junio debido a la inactividad del sistema ILS, lo que provocó más cancelaciones, afectando a aproximadamente 6.100 pasajeros.
Las tres aerolíneas coincidieron en que los resultados del año anterior estuvieron condicionados por factores externos, principalmente asociados a limitaciones en infraestructura y destacaron la relevancia de seguir avanzando en mejoras técnicas que permitan una operación más resiliente frente a eventos meteorológicos.
Desde Latam señalaron que “la aviación comercial es mucho más que un medio de transporte: es un motor de crecimiento económico, integración territorial y conexión internacional para Chile (...) es clave seguir fortaleciendo la infraestructura aeroportuaria del país” y agregaron que “si bien el clima es un factor (que limita la operación), contar con el equipamiento adecuado permite mitigar esos impactos y mantener la continuidad operacional”.
Modernización del ILS
“Como industria hemos planteado soluciones de corto y mediano plazo”, señalaron tanto la IATA como la Achila, quienes en un trabajo conjunto establecieron las prioridades claves para el desarrollo de la aviación comercial en Chile hacia el 2030, buscando las mejoras de 19 terminales nacionales.
Y mencionaron que los terminales como el de Copiapó, La Serena, Osorno, Puerto Montt, Valdivia, Balmaceda y Punta Arenas, no cuentan con la tecnología adecuada para aterrizar en condiciones de baja visibilidad y agregaron que “hemos planteado como prioritario la necesidad de implementar luces de aproximación y ILS Categoría 1 en La Serena y Osorno; ILS Categoría 2 Especial en Copiapó, Valdivia, Balmaceda y Punta Arenas; y acelerar implementación de ILS Categoría 3 en Puerto Montt”.
Además, insistieron en que una solución de corto plazo es la extensión de horarios en estos aeropuertos. “Estimamos que podría generar, en un año, un aumento de 1 millón de asientos o sobre 5 mil vuelos adicionales a la oferta actual”, señalaron.