Los resultados de Samsung Electronics decepcionaron hoy a los analistas e inversionistas, en momentos en que la empresa reporta altos gastos y el aumento en el valor del won, la moneda surcoreana, golpea sus exportaciones.
La gigante tecnológica reportó un ingreso operacional de 15,1 billones (millones de millones) de wones (US$ 14.200 millones) en el cuarto trimestre de 2017, al menos un billón de wones por debajo de las expectativas de los analistas.
Gran parte de la decepción viene de la fuerte apreciación de la divisa de Corea del Sur, que en los últimos tres meses del año pasado avanzó 7% contra el dólar.
"El impacto de la moneda es inevitable", dijo a Bloomberg el analista surcoreano de tecnología Sanjeev Rana. "No puede mitigarse a no ser que se suba el precio de los productos".
La empresa también tiene contratos de venta de pantallas con Apple para el nuevo iPhoneX, lo que le ha permitido ampliar sus ingresos, "pero esos contratos tienen precios fijos. El fabricante corre los riesgos", señaló el experto.
Las ventas durante entre octubre y diciembre fueron de 66 billones de wones, por debajo de las expectativas de analistas que apuntaban a 67,6 billones.
Al cierre de la bolsa en Seúl, las acciones de Samsung perdieron 3,2%. Desde noviembre, han retrocedido cerca de 12%.
Tras el reporte de los resultados, Morgan Stanley emitió un informe en el que señaló que las ganancias operativas podrían ser menores a lo anticipado en 2018, en medio de menores ventas de televisores y smartphones.