La industria automotriz estadounidense no se vio afectada por el debilitamiento del mercado laboral y la caída de la confianza de los consumidores en junio, superando las estimaciones de los analistas y completando el mejor primer semestre para las ventas de vehículos desde 2008.
Tanto General Motors, Ford y Chrysler informaron aumentos superiores a los previstos respecto del mismo período del año anterior, en el que dominaron el mercado estadounidense debido a las bajas de vehículos en Toyota y Honda Motor ocasionados por el tsunami de Japón. El aumento de junio del 22% para la industria es un motivo de optimismo luego de que los analistas subestimaran la demanda después de ventas inferiores a las proyectadas en mayo.
Las ventas de vehículos livianos se aceleraron a una tasa anual con ajuste estacional de 14,1 millones, según la firma de investigación Autodata Corp, superando el promedio de 13,8 millones de las estimaciones previas de los analistas. (Bloomberg)