Papeles del Banco Central retroceden por ajuste en las expectativas inflacionarias

Por José Manuel Duarte



Contrario a lo que se esperaba a principios de año, la inflación habría cambiado de rumbo, cediendo parte de la presión al alza que mantenía en los últimos dos meses. Esto debido a que el optimismo con que arrancó 2012 ya se ha diluido en los mercados, con lo que en el mercado ya se estaría incorporando la posibilidad de una inflación más baja para este año.

El gerente de renta fija local de Celfin, Rodolfo Hoffmann, aclara que es en los papeles nominales del Banco Central donde se ve reflejado con más fuerza los vaivenes.

“Los papeles a dos años en pesos han caído 41 puntos base en lo que va de mayo, lo que se ve reflejado en las expectativas del mercado con respecto a la inflación”, afirma Hoffmann, agregando como antecedente que en las últimas tres semanas la expectativa inflacionaria acumulada para los meses de mayo, junio y julio pasó de 0,8% a 0,5%. Así, el experto estima que para fin de año la inflación de 2012 estará en torno al 2,7%. Por su parte, el analista de renta fija de BICE Inversiones, Cristóbal Doberti, explica que “el efecto de un menor crecimiento mundial ya se está internalizando en las tasas de los papeles del Banco Central, que están en su punto más bajo desde principios de año”.

Cambios en las perspectivas


En esta evolución de la tendencia se conjugan dos factores: por una parte, los cambios en las tensiones internacionales, donde algunas de las dudas sobre el rumbo que está tomando la economía europea comienzan a disiparse, en particular con respecto a Grecia, que tras las elecciones generales debería mostrar algún cambio.

A ello se suma que a nivel local la presión inflacionaria proveniente del precio de los combustibles también ha cedido, con el petróleo WTI anotando en el último mes una caída de 15%. Esto lleva a algunos analistas a considerar que la TPM podría terminar el 2012 incluso más abajo de lo que comenzó.