La ministra del Trabajo, Evelyn Matthei, participó esta mañana en una reunión desayuno con empresarios de Asimet, donde se refirió a los desafíos del mercado laboral que tiene Chile para alcanzar el desarrollo.
Al ser consultada respecto de la flexibilidad laboral, la ministra fue enfática en señalar que hoy "es prácticamente imposible" cambiar la legislación en general, y que por esa razón se ha preferido avanzar por sectores.
"Cambiar el código laboral en este momento... No están los votos, no está el ánimo. Por lo tanto, lo que estamos haciendo es ir por sectores cambiando aquello que se puede donde hay consenso, donde es obvio que se necesita", aseguró.
Como ejemplo se refirió a un proyecto de ley para el joven estudiante que trabaja para que su jornada de trabajo se adecue a sus estudios, lo que, según, afirmó, el Código del Trabajo hoy no lo permite.
Por otra parte, la secretaria de Estado se refirió al actual sistema laboral chileno.
"Nuestro salarios son mayores y nuestra productividad es inferior, por lo que tenemos una tremenda competencia. Tenemos que empezar a correr rápido, porque nos están alcanzando y porque cuando nos llegue la ola va a ser demasiado tarde para correr", sostuvo.
Del mismo modo, Matthei expuso que países como India, China, Taiwán, y también otros más cercanos, como Perú, nos llevan la delantera en materia de capacitación y preparación de su capital humano para el futuro, lo que finalmente incide en la competitividad.
"Estamos atrasados 60 años en materia de capacitación. Se nos viene un tsunami encima y nosotros estamos acá mirando nuestro territorio, sin darnos cuenta del tremendo ataque, porque va a ser un ataque a nuestros empleos".
En tal sentido, y refiriéndose a cómo mejorar la productividad de los trabajadores chilenos señaló la conveniencia de adoptar el modelo de Consejos de Competencias Laborales o skillcouncils, el que, guiado por las necesidades de la industria, deben proponer una carrera laboral para los trabajadores, con el fin de mejorar su productividad y competitividad.
Por su parte, el presidente de Asimet, Gaston Lewin, indicó que el sector metalúrgico metalmecánico es esencialmente manufacturero y que en sus procesos requiere de personal calificado y especializado, principalmente técnico.
Explicó que las industrias del sector están invirtiendo tiempo y recursos en la capacitación de sus trabajadores, y que por esa razón el promedio de sus salarios es muy superior al mínimo.
Señaló que, además, la antigüedad promedio en el sector es superior a 8 años, lo que revela que los niveles de rotación de personal son más bajos en que otros sectores productivos.