El Informe de Política Monetaria (IPoM) dejó un sabor amargo en varios analistas, quienes si bien anticipaban un discurso menos optimista del Banco Central en junio, lo que escucharon finalmente fue un mensaje más pesimista. Algo que agradece Felipe Jaque.
El gerente de Estudios de LarrainVial -quien se desempeñó por 15 años en el instituto emisor en cargos clave como jefe de Análisis y Proyecciones Internacionales- destaca que el IPoM de junio está más "alineado" con lo que "realmente" ha sucedido en la economía en los últimos meses. Y si bien reafirma su proyección de PIB en 2,8% este año, no descarta riesgos que lleven a la actividad a la parte baja del rango propuesto por el emisor: 2,25%.
- El presidente del Banco Central dijo que más que optimista o pesimista, se definía como realista del estado de la economía chilena.
- Una diferencia respecto a marzo es que probablemente hoy sí sabemos que estamos en el piso. Ahora, la cuestión es si nos vamos a levantar de ese piso. Hay pocos riesgos de que nos desaceleremos más, existen eso sí, pero la discusión de fondo es si nos vamos a reacelerar o no.
- ¿Hay una posibilidad real de irnos a la parte baja del rango?
- Nos parece baja, aunque nunca es nula. ¿Por qué no es nula? Tenemos algunos riesgos latentes en el escenario externo por el lado de China y a nivel financiero que son importantes para Chile.
- ¿Se marchitaron definitivamente los brotes verdes?
- Más allá de la semántica, para hablar de brotes verdes en propiedad probablemente se asemeje más cualitativamente a una economía que se recupera en V, y eso no está pasando. Hay que mirar si hay una recuperación genuina o simplemente nos está ayudando la base de comparación.
- ¿Es genuina la recuperación?
- Hay un buen aporte del gasto público. Sin ese aporte, probablemente estaríamos aún más planos en el ciclo. Falta aún para ver una recuperación de verdad. Ahora, es cierto que en política monetaria y fiscal se ha hecho mucho. Hay que tener cuidado en decir si efectivamente ya se ha hecho todo. En términos de política monetaria, si tenemos sorpresas negativas en el segundo semestre, probablemente puede ser plausible un escenario de recortes adicionales de tasa.
- ¿Cuál debiera ser ese escenario?
- Seguir creciendo más cerca del 2% que del 3% en el segundo semestre. Eso sí, no es nuestro escenario más probable. Pero, sin duda, todavía no se agotaron todas las balas en la política monetaria.
- Pero el Central y Hacienda ven que la política monetaria y fiscal ya hicieron su trabajo. Entonces, ¿por dónde se puede volver a crecer más?
- Faltan medidas como acotar un poco las reformas, algo que el ministro Valdés ha tratado de hacer. Además, probablemente necesitaremos algunas medidas transitorias que sean pro inversión en el corto plazo. La pelota está en el sector privado en 2016 y, si no se toman medidas adicionales, probablemente tendremos un 2016 bastante lento. Si las confianzas se recuperan gradualmente, podríamos tener un crecimiento sobre 3% el próximo año. Si eso no se da, perfectamente podemos estar hablando de un 2016 más cerca del 2%.
- ¿Se diluyó el efecto del cambio de gabinete?
- Hay que darle espacio a los nuevos ministros para que se desenvuelvan en el gabinete. Se han dado señales en la dirección correcta. No creo que sea justo decir en estas semanas si cumplió o no cumplió con su rol de cambio.
- El Central volvió a recortar la proyección para la inversión. ¿Se abre un escenario contractivo este año?
- Sin duda. Ya estamos parados a mediados de año y lo que hemos visto en indicadores como importaciones de bienes de capital es que podríamos terminar con un número negativo. Hay que ser justos es que nadie está proyectando crecimientos de la inversión muy elevados. Nosotros esperamos un crecimiento en torno a 1% para este año.
"Perfectamente, el PIB potencial puede ser 3,5%-4%"
- Uno de los puntos que volvió a tomarse el debate tras el IPoM fue el PIB potencial. El Central ratificó que en septiembre se revisará. ¿Qué rango es coherente hoy?
- Es una variable bien difícil de estimar. Una de las variables más relevantes para estimarlo es cuánto invierte la economía y, por lo tanto, cuánto puede crecer por ese lado. Pero perfectamente podemos estar hablando de un número en un rango entre 3,5% y 4%, lo que significa que las holguras que se generan en este ciclo de baja son menores que las que hubiésemos estimado antes.
Esto es, además, relevante para la política monetaria, porque establece cuánto espacio finalmente se generó y cuán expansiva puede ser la tasa de interés.
- ¿Cuánto debiera crecer el gasto público los próximos años para alcanzar la meta de balance estructural?
- Se necesita un crecimiento bastante menor del gasto público en 2016-2017 para llegar al balance. Y no se descarta que sea bien complicado hacerlo. Efectivamente, hay que hacer un esfuerzo de un menor crecimiento del gasto, algo que el ministro ha mencionado. Lo más relevante de eso es que significa que el sector público se retira del impulso y el paso siguiente es que el sector privado tome esa plaza. Eso requiere una disciplina fiscal bastante fuerte en el próximo par de años. Hay que considerar que hay una reforma tributaria en implementación.
De todas maneras, los ingresos adicionales por reforma tributaria dan espacio para crecer en gasto público porque son ingresos estructurales.
- ¿Confía en que la recaudación de la reforma tributaria se alcanzará?
- Como es lógico, eso es súper dependiente de cómo siga el ciclo económico hacia adelante. Y bien podría ser que con menos inversión, crecimiento e impulso de la demanda interna, podamos terminar con una recaudación menor que la que se estimó al principio de la reforma.