Política

Financial Times: El brote de coronavirus en Chile ayuda a revivir la suerte de Piñera

La aprobación del Presidente se ha más que duplicado como consecuencia de la pandemia.

Por: Financial Times | Publicado: Miércoles 22 de abril de 2020 a las 09:45 hrs.
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Cuando el presidente de Chile, Sebastián Piñera, ordenó a los militares que salieran a las calles el año pasado en una ofensiva contra las protestas antigubernamentales, la medida se enfrentó a una indignación pública generalizada. El mes pasado, el ejército regresó a las calles, con una recepción muy diferente.

El ejército ha sido llamado para hacer cumplir las restricciones destinadas a detener la propagación del coronavirus y la presencia de soldados en las calles casi ha sido celebrada por chilenos temerosos de la enfermedad mortal.

El cambio de opinión hacia los militares es solo un ejemplo de cómo la pandemia del coronavirus ha ayudado a resucitar la fortuna política de Piñera.

La aprobación en las encuestas para el líder multimillonario, que se considera ampliamente fuera de contacto con la gente común, se ha más que duplicado desde un mínimo del 9% en febrero hasta un 25%. El virus también terminó con las manifestaciones masivas contra la desigualdad que amenazaron con derrocar al gobierno de centroderecha de Piñera el año pasado.

"Para Piñera, (el coronavirus) ha sido un salvavidas. Se estaba ahogando y fue rescatado por su peor enemigo", dijo Patricio Navia, cientista político de la Universidad Diego Portales, quien compara la relación de Piñera con los chilenos, desde que estallaron las protestas en octubre, con un matrimonio a punto de divorciarse.

"Es como si de repente uno de sus hijos tuviera cáncer, por lo que tuvieron que dejar de lado sus diferencias. Pero no significa que una vez que esta crisis haya terminado las cosas no volverán a la normalidad... podría acercarlos, pero tal vez aún odiarán las posturas de los demás", dijo.

Se considera que Chile ha lidiado con el brote de coronavirus con bastante éxito en comparación con algunos otros países de la región, en particular Brasil y México. La cifra nacional de muertes llegó a 139 el lunes, mientras que el número de chilenos que dieron positivo superó los 10.500, de los cuales casi el 45% desarrolló síntomas.

A fines del año pasado, el gobierno de Piñera anunció un paquete de estímulo económico de US$ 5,5 mil millones para abordar algunas de las demandas más inmediatas de los manifestantes. Pero las quejas subyacentes que llevaron a los disturbios permanecen. Chile sigue siendo una sociedad muy desigual con servicios públicos irregulares y una élite arraigada.

Marta Lagos, una encuestadora en Santiago, dijo que era inevitable que las protestas comenzaran nuevamente una vez que la amenaza del coronavirus hubiera disminuido. De hecho, un pequeño grupo reapareció en Plaza Italia -el centro de las manifestaciones del año pasado en el centro de Santiago- luego de que se levantaron algunas restricciones de cuarentena el lunes, pero fueron dispersados por la policía. 

Para terminar con las manifestaciones, dijo Lagos, el gobierno necesita abordar las principales demandas de los manifestantes: la reforma del sistema de pensiones, cuyos montos son a menudo más bajos que el salario mínimo; un aumento en el salario mínimo y un aumento a los impuestos para financiar la participación del estado en la economía. 

Felipe Larraín, quien fue ministro de Hacienda de Piñera hasta la reorganización del gabinete a fines del año pasado, argumenta que sería difícil para el gobierno hacer mucho más de lo que ya se está haciendo. El paquete de estímulo fiscal de Chile hasta el momento es uno de los más grandes de la región, con un valor aproximado de US$ 18 mil millones, o casi el 7% del Producto Interno Bruto (PIB). 

"El gran problema social de hoy es el coronavirus, por lo que se están implementando políticas sociales para contrarrestar eso. No hay suficiente para todo, debemos priorizar", dijo, agregando que es crucial mitigar el impacto de las quiebras "inevitables" y que espera que los niveles de desempleo aumenten por encima del 10%.

Sin embargo, dijo que ha habido un buen progreso y se ha utilizado una cantidad "masiva" de recursos, con el déficit fiscal llegando al 8% del PIB este mes, según las últimas cifras del gobierno. Además, Chile tiene más espacio para actuar que otros países de la región.

"Algunos países tienen muy poco espacio fiscal. Pero debido a que Chile ahorró de manera responsable en el pasado y tiene niveles de deuda relativamente bajos, puede hacer más ahora", dijo Larraín.

Navia cree que si el brote de coronavirus se controla relativamente pronto, las protestas volverán a las calles con toda su fuerza antes del plebiscito constitucional de octubre. La votación estaba originalmente programada para este mes, pero tuvo que posponerse debido a la pandemia.

Pero si las predicciones más negativas para las consecuencias económicas sobre el Covid-19 se hacen realidad, con un desempleo que llega al 20%, entonces los chilenos pueden tener problemas más urgentes en sus mentes que la nueva Constitución, que fue una de las principales demandas de las manifestaciones del año pasado. 

"Cuanto peor es el coronavirus en Chile, menos probable es que las protestas regresen", dijo Navia. "Todo dependerá de cuándo termine la crisis del coronavirus".

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