Política

Stephan Schubert (Indep. Partido Republicano): “Si, efectivamente, disminuir la jornada nos hace ser más eficientes podríamos estudiarlo”

Por otro lado, al diputado electo le preocupa “bastante” el “ánimo revanchista” que percibe en el trabajo de la Convención Constitucional.

Por: Claudia Rivas A. | Publicado: Jueves 3 de marzo de 2022 a las 08:49 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Es uno de los pocos diputados electos sin experiencia previa en el mundo público y que se decidió a dar el salto desde lo privado. Stephan Schubert Rubio (43) arriba a la Cámara de Diputados como independiente en cupo del Partido Republicano y en representación del distrito 23 (Carahue, Cholchol, Cunco, Curarrehue, Freire, Gorbea, Loncoche, Nueva Imperial, Padre Las Casas, Pitrufquén, Pucón, Saavedra, Temuco, Teodoro Schmidt, Toltén y Villarrica).

Sin embargo, antes de ser electo diputado postuló a la Convención Constitucional (CC) por el mismo distrito, sin éxito. Pero aprendió la lección, ya que pese a obtener la segunda mayoría individual, quedó fuera debido a que intentó llegar a la CC como independiente sin apoyo de ningún pacto. Fue justamente por la buena votación que obtuvo que se le acercaron desde varios partidos, ofreciéndole un cupo en sus listas y aceptó la oferta del Partido Republicano.

-¿Con qué actitud llega a la Cámara de Diputados?
-Siento un gran honor de llegar a la Cámara y creo que en el momento en que está nuestro país es importante que hayan distintas miradas en los lugares de toma de decisiones, como la constituyente y el Congreso. Así lo enfrento.

-El futuro gobierno ya dijo que sus prioridades al asumir será las reformas tributaria y de pensiones, respecto a la primera, ¿le preocupa que se haga una nueva reforma tributaria?
-El tema tributario es muy sensible. Ya tuvimos una reforma tributaria en el gobierno de Bachelet II que creo que no tuvo un buen impacto, no mejoró la recaudación y generó muchas cortapisas, disminuyendo, de alguna manera, el crecimiento de la economía. Más bien estoy por mantener los recursos en el bolsillo de los contribuyentes y que éste determine con libertad dónde los va a gastar y cómo los va a invertir. Estoy más por la tesis de disminución de la carga tributaria que de aumento de impuestos, sobre todo con un Estado tan ineficiente como el que tenemos. Por lo tanto, me preocupa un alza tributaria en este momento en que sabemos que ya estamos en un escenario político-económico bastante incierto al que si se le suma una reforma podría llevar a generar mercados negros, por ejemplo; y a las empresas les sale más rentable evadir y pagar la multa si las pillan, que pagar los impuestos.

-El argumento de quienes están de acuerdo es que quienes tienen más deben contribuir en mayor medida, ¿comparte esa premisa?
-Es una mirada que busca redistribuir a través de los impuestos. Y si bien es cierto que los impuestos pueden cumplir esa función en alguna medida, efectivamente los que ganan más pagan más impuestos. Las tasas son más altas para aquellos que tienen mayores ingresos. El problema está en que hay una evasión importante, que es la que hay que atacar; hay que analizar también ciertos beneficios tributarios que tienen algunos sectores, entidades o grupos. Pero, entiendo, que se ha demostrado que el aumento de impuestos a los llamados súper ricos, por ejemplo, no incrementa la tributación, no beneficia al Fisco y sus arcas, sino que tiene un efecto absolutamente contrario que es la fuga de capitales.

-Eso estaría pasando dicen algunos expertos.
-Claro, eso está ocurriendo. Hay gente con altos ingresos que ya se está domiciliando fuera de Chile, que se está llevando sus inversiones fuera del país. Por lo que el impuesto a los súper ricos perjudica. Tenemos varios ejemplos en el barrio donde han hecho ese intento y el resultado es malo.

-¿Y le parecería razonable seguir avanzando en un royalty minero?, se lo pregunto porque en el Congreso hay iniciativas bastante avanzadas.
-No me puedo pronunciar porque desconozco el detalle. (Pero) no tengo problema si eso beneficia a nuestro país en cuanto a la recaudación tributaria y, a la vez, permite que siga siendo una industria competitiva, siga funcionando y generando recursos. O sea, no matar la gallina de los huevos de oro. Pero no en la medida que matemos la industria o la hagamos menos competitiva. Porque nosotros tenemos varios elementos que nos hacen menos competitivos, lo que ha permitido que la industria minera de Perú, por ejemplo, haya crecido por sobre la nuestra en estos últimos años, como es el caso del costo de la energía que nosotros tenemos y ellos no. El costo laboral, dado que nuestras leyes laborales son más severas que las de otros países también encarecen nuestro cobre exportado.

-A propósito de leyes laborales, ¿le parece una buena iniciativa rebajar la jornada laboral de 45 a 40 horas o es peligrosa en materia de empleo, por ejemplo?
-Ahí salen a relucir varios estudios que venimos escuchando hace décadas, que dicen que trabajamos más horas que el resto del mundo, pero también somos menos eficientes. Es decir, nuestra hora/hombre parece que es mucho menos eficiente que la de otros países. Habría que analizarlo y no me niego a ello. Lo que sí es que en el momento en que nos encontramos, donde luego del estallido social y de la pandemia tenemos amplios sectores de la economía que están recién poniéndose de pie, fuertemente endeudados, que se ve que la economía mundial y nacional viene ralentizándose fuertemente, creo que subir los impuestos por un lado y luego disminuir las horas de trabajo, iría en el sentido contrario. Porque en el fondo es una forma encubierta de incrementar la remuneración. Hay que estar consciente de ello y ver qué efectos puede tener en la economía para no perjudicarla. Si, efectivamente, disminuir la jornada nos hace ser más eficientes podríamos estudiarlo.

-Otra de las prioridades del próximo gobierno es la reforma de pensiones, ¿a qué debería apuntar una reforma que se aspire a aprobar?
-Creo que lo que hizo el gobierno a última hora mejora y va en buen camino, hay que ver cómo financiarlo, por supuesto. Debería enfocarse en incrementar el aporte individual y el aporte del Estado en alguna medida. Entiendo que por ahí va la solución de los países desarrollados, donde el Estado también tiene una inversión, pero teniendo en cuenta este tema piramidal, donde tenemos una población que está envejeciendo, por lo tanto, los jóvenes van a financiar parte de las pensiones de los jubilados y tenemos que ver que se sustente el sistema. Se debe modificar el sistema, pero permitir la participación de particulares, si el Estado lo quiere hacer también; incrementar el ahorro personal subiendo en algunos puntos el ahorro obligatorio y atrasar el tiempo de jubilación; también podría ser una opción que el empleador le aporte, habría que verlo.

-Postergar la edad de jubilación es un debate de larga data en que no hay acuerdo...
-Creo que no hay que cerrarse a ninguna alternativa, porque hoy día –a diferencia de cuando el sistema inició- los chilenos llegamos a los 85 o 90 años y la opción de vida útil y produciendo también se ha postergado.

Convención: "Ánimo un poco revanchista"

-Puesto que su primera opción fue la Convención, ¿cómo ve desde fuera el trabajo que está realizando?
-Me preocupa bastante, creo que no se está cumpliendo lo que se prometió y esperaba. Creo que muchos de los convencionales no entienden o no le están tomando el peso a lo relevante que estamos haciendo. Las instituciones son relevantes, nosotros tenemos una tradición que, si bien queremos cambiar y modernizar, esto de refundar todo, de reiniciar todo, de borrar nuestra historia es equivocado. Me parece que efectivamente hay cosas que podemos mejorar, pero ver este ánimo un poco revanchista... esta mirada del proletario tomándose el poder es totalmente equivocada.

-No está de acuerdo con lo que se ha hecho...
-No veo que hayan hecho un buen trabajo, no hay espacio para los que están en minoría y han sido derechamente pasados a llevar. Eso no le augura un buen futuro, porque no asegura una aprobación, lo que sería nefasto por haber perdido todo este tiempo y toda esta plata; y si se aprobara tampoco le augura un buen destino, porque probablemente va a ser modificado permanentemente. Y posiblemente nos vamos a ganar un problema social. Por eso creo que una oportunidad como la que teníamos se está echando por la borda por este ánimo revanchista.

-En este escenario y hasta este minuto, ¿está más cerca de aprobar o rechazar el plebiscito de salida?
-En este minuto no tenemos aún el texto constitucional, pero lo que ya se ha aprobado, me parece que es una mezcla de instituciones –que ni siquiera hay una coherencia entre ellas- en que incluso algunas de ellas colisionan con otras; creo que no van a aportar al desarrollo, sino que incluso lo vana entrampar y creo que no están entendiendo lo que la sociedad requiere. Y, en ese sentido, estaría por rechazar, pero con el ánimo sí de hacer cambios en muchas instituciones que hay que reformar. Lamento mucho que una oportunidad que pudo ser muy buena se esté desperdiciando.

Lo más leído