El
Gobierno de Evo Morales subió el valor del barril de petróleo producido
en Bolivia de US$ 27 a US$ 59, con el fin de incentivar a una mayor
producción de carburantes líquidos, informó hoy la Cámara Bolivia de
Hidrocarburos y Energía (CBHE).
Según un comunicado de la
entidad, que agrupa a las principales petroleras que operan en el país,
el ministro boliviano de Hidrocarburos, Luis Fernando Vincenti, informó
que, además del decreto que incrementa los precios de los combustibles,
se emitió otra norma que eleva el pago por la producción del crudo que
va a las refinerías.
Reconoció que el precio actual (US$ 27) "desincentiva la producción de petróleo", lo que ha ocasionado
una "declinación" en la producción de carburantes líquidos.
"El precio del petróleo en el mercado internacional está en los US$ 91 (...) Por eso es que uno de los decretos aprobados, reconoce un
estímulo que va llegar al orden de los US$ 59 para la producción.
Ese sería el precio al que nosotros vamos a comprarle petróleo a las
empresas que trabajan en Bolivia", dijo Vincenti, según el boletín de la
CBHE.
Con esta medida, el Ejecutivo espera "incentivar la
búsqueda de petróleo" para reducir costes de importación de ese
energético, agregó la autoridad.
La semana pasada, Morales
admitió que si bien Bolivia tiene buenos resultados en la exploración y
explotación de gas, "está mal en petróleo", por lo que instó a las
empresas a invertir para aumentar el número de perforaciones con ese
propósito.
Según un informe oficial, a septiembre de este año,
Bolivia produjo más de 45.000 barriles de hidrocarburos líquidos al
día, cantidad que no es suficiente para cubrir el mercado interno.
El Gobierno de Morales sorprendió el domingo con un decreto que eleva
el precio de los principales combustibles entre 57% y 82%, con el
objetivo de dirigir a otras áreas los recursos destinados a la
subvención del coste de esos productos y frenar su contrabando.
Bolivia tiene un déficit en la producción de diesel, por lo
que compra el combustible a Venezuela para cubrir alrededor de la mitad
de la demanda interna, mientras que en 2008 el país empezó a importar
gasolina de Chile.