Un conflicto laboral impide la
exportación de celulosa de la planta papelera que la empresa
finlandesa Botnia tiene en el oeste de Uruguay, donde hoy continuó
paralizada la carga y descarga de materia prima en el puerto de
Nueva Palmira.
El trasiego de la celulosa permanece estancado desde el sábado
por la noche por un conflicto sindical en la empresa Río Estiba.
Esta compañía es la encargada de la carga y descarga en la
terminal portuaria de Ontur, en Nueva Palmira, punto de destino de
la celulosa producida en la planta que Botnia tiene en Fray Bentos.
Ayer no pudo ser cargado un buque con 20.000 toneladas de
celulosa que estaba previsto que zarpara hacia Europa, principal
mercado de la pasta de papel que se produce en la planta de Botnia
desde que empezó a operar en diciembre pasado.
Los trabajadores han denunciado la negativa de la firma Río
Estiba a pagar doble remuneración por el trabajo de los domingos y
la intención de la compañía de cambiar el actual horario laboral.
Esta planta de celulosa es el origen de un enfrentamiento en
Uruguay y Argentina, pues el Gobierno de Buenos Aires y activistas
de defensa del medio ambiente argentinos afirman que la fábrica
produce un deterioro ambiental en el río La Plata, que separa ambos
países.
Este conflicto ha sido llevado a la Corte Internacional de
Justicia de La Haya.