Israel lanzó "amplios ataques" contra objetivos de Hamás en Gaza, matando a cientos de palestinos y rompiendo un acuerdo de alto el fuego de dos meses tras semanas de desacuerdo sobre cómo extender la tregua.
Las autoridades sanitarias del enclave controlado por Hamás informaron de que al menos 404 personas murieron y 526 resultaron heridas en los ataques aéreos de la madrugada del martes, en uno de los días más mortíferos desde que se inició el conflicto.
La oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró que los ataques se lanzaron en respuesta a la "reiterada negativa del grupo militante palestino a liberar a nuestros rehenes" y al rechazo a las propuestas de los mediadores en las conversaciones para prolongar el alto el fuego.
“Israel, a partir de ahora, actuará contra Hamás con creciente fuerza militar”, declaró la oficina de Netanyahu en una publicación en la red social X.

Hamás condenó la acción de Israel como una “agresión traicionera” y añadió: “Netanyahu y su gobierno extremista han decidido revocar el acuerdo de alto el fuego, exponiendo a los prisioneros de Gaza a un destino desconocido”.
Un funcionario israelí declaró que la nueva ofensiva, la acción militar más intensa desde que se alcanzó el acuerdo de alto el fuego en enero, tenía como objetivo “comandantes militares de rango medio, dirigentes e infraestructura terrorista de Hamás”.
El funcionario añadió que la campaña “continuará mientras sea necesario y se extenderá más allá de los ataques aéreos”, lo que aumenta las expectativas de una nueva invasión terrestre del territorio destrozado.
Más tarde el martes por la mañana, el ejército israelí instó a los residentes de varias regiones fronterizas de Gaza a evacuar a refugios en las ciudades de Ciudad de Gaza y Khan Younis.