Trichet: proteccionismo ante crisis "sería un grave error"
El presidente del Banco Central Europeo recordó los "efectos desastrosos" que esta medida ha tenido en anteriores fases de desaceleración.
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El presidente del Banco Central Europeo
(BCE), Jean-Claude Trichet, advirtió hoy de que sería un "grave
error" responder a la actual crisis económica con una política
proteccionista.
El proteccionismo es una opción "peligrosísima", en opinión de
Trichet, que recordó los "efectos desastrosos" que esta política ha
tenido en anteriores fases de desaceleración.
El presidente de la autoridad monetaria se sumó así a las voces
que desde la Comisión Europea y la presidencia checa de turno de la
UE claman contra la posibilidad de que algunos Estados miembros
traten de sortear la crisis con la defensa de su mercado nacional.
Para el economista francés, en la actual coyuntura, el
proteccionismo económico sería un error tanto a nivel europeo como
global.
En su intervención en un encuentro de eurodiputados con miembros
de los parlamentos nacionales, el presidente del BCE afirmó que el
principal objetivo de las autoridades económicas en este momento
debe ser la resolución de la crisis, pero de manera tal que se evite
la repetición de problemas similares en el futuro.
"No podemos volver al 'statu quo'" previo al estallido de las
turbulencias financieras, advirtió, e insistió en que el objetivo ha
de ser la estabilidad macroeconómica a medio y largo plazo.
Trichet subrayó que hace falta una regulación más estricta del
sistema financiero, para prevenir los excesos que han desembocado en
la situación actual y dar prioridad a la estabilidad.
En este ámbito, consideró necesario introducir incentivos para
evitar que las entidades se concentren en los beneficios a corto
plazo, aumentar la transparencia -sobre todo en los mercados e
instrumentos financieros menos regulados- y limitar, en la medida de
lo posible, la tendencia del sistema financiero de acumular riesgos
y endeudamiento en las fases altas del ciclo.
También se refirió a la política monetaria y recalcó la
determinación del BCE a contribuir a la estabilidad macroeconómica
mediante el "firme anclaje" de las expectativas de inflación en
torno al objetivo del 2%.
Sobre las reglas presupuestarias, advirtió a los Estados miembros
de que "sería muy grave" no respetar el Pacto de Estabilidad.
En cuanto a los mecanismos de vigilancia del sistema financiero,
Trichet consideró que el Fondo Monetario Internacional (FMI) debería
mejorar la supervisión de las economías industrializadas.
Esta crisis nos ha enseñado la "dolorosa lección" de que los
países ricos "también necesitan vigilancia, y muy estricta", señaló
el presidente del BCE.