La bolsa de Sao Paulo cerró hoy en rojo
por séptima jornada consecutiva, con un retroceso del 3,97% y su índice Ibovespa estacionado en el piso de los 35.609
puntos, en una sesión en la que se vivió una intensa sacudida.
Minutos después de la apertura de la sesión los negocios fueron
suspendidos por media hora cuando el selectivo brasileño se desplomó
por debajo del 10%, pero a última hora recuperó el vuelo
para minimizar las pérdidas.
De los 66 títulos que componen el Ibovespa, 53 cerraron en
terreno de las pérdidas y trece en positivo, en una sesión en la que
cambiaron de manos 5.169.556.774,22 reales (unos US$2.234 millones) en 252.973 operaciones financieras.
La bajada más pronunciada fue registrada por los papeles
preferenciales de la petrolera estatal Petrobras, que cayeron el
7,26%o, mientras que las similares de la compañía minera
Vale, los segundos más negociados de la jornada, perdieron el 1,01%.
En el mercado de divisas el real brasileño volvió a la senda de
las desvalorizaciones y retrocedió hoy el 5,27% frente al
dólar estadounidense, divisa que cerró vendida a 2,314 reales en el
tipo de cambio comercial.