La compañía aérea italiana Alitalia recibió 16
sanciones, por un valor de 255.000 euros (unos US$ 318.000), por la falta de
asistencia a los pasajeros durante el paro llevado a cabo por su personal de
vuelo y tierra el pasado lunes en el aeropuerto de Fiumicino, por el que fueron
cancelados 124 vuelos.
Las sanciones fueron anunciadas por el Ente de la Aviación Civil
(Enac) y su presidente, Vito Riggio, ha afirmado que ampliará los controles
sobre las consecuencias de la huelga de celo a días sucesivos y que Alitalia
podría pagar entre 500.000
a 1.000.000 de euros.
En Fiumicino han sido cancelados hoy 30 vuelos y otros
registran retrasos en salidas y llegadas.
Las anulaciones se deben a la huelga de celo que está
llevando a cabo parte del personal de la aerolínea en contra del nuevo convenio
colectivo que les ofrecen los futuros compradores de Alitalia.
Con estas nuevas suspensiones, el aeropuerto romano suma su
cuarto día consecutivo de inconvenientes causados por parte de los trabajadores
de Alitalia.
El miércoles, los trabajadores continuaron su protesta con
una huelga de celo que llevó a la supresión de otros 50 vuelos.
Aumenta, mientras tanto, la fatiga y la ira entre los
pasajeros todavía en la cola de los vuelos internacionales para tratar de
volver a casa.
Desde Bruselas, el Comisario de la UE de Transportes,
Antonio Tajani, ha asegurado que se vigila el cumplimiento de los derechos de
los pasajeros en el transporte aéreo.
"Creo que la UE tiene el deber de proteger los derechos
de los pasajeros", subrayó.
Los viajeros "deben ser informados de lo que pasa, tienen derecho a
un reembolso del billete y ser transportados a otros lugares si se cancelan los
vuelos. Son normas europeas que garantizan el respeto a los pasajeros",
dijo.