Luego de
que unos 5.600 mineros iniciaran hoy una huelga en la mina de
cobre de Chuquicamata, la presidenta Michelle Bachelet desde Valparaíso, lamentó
la situación que se vive en Codelco.
"He dicho que lamentamos profundamente esta situación y que hicimos todo lo
posible porque se revirtiera. Eso no fue factible y creemos que eso no le hace
bien al país", sentenció la Mandataria.
En tanto, la vocera de Gobierno, Pilar Armenet, reiteró el
llamado a los trabajadores para que acojan la oferta de la empresa –la que el
gobierno considera "generosa"-, para que las partes puedan llegar a un pronto acuerdo.
"Se trata de una empresa (…) que es muy importante para
todos los chilenos porque sus recursos ayudan a satisfacer el financiamiento de
todas las prestaciones sociales, de tal manera que por eso nos preocupa y
deseamos un avance en este sentido", sentenció la secretaria de Estado.
Un posible fin al conflicto se vislumbra luego de los dichos de gerente de Desarrollo Humano de Codelco Norte, Humberto
Fernandois, que declaró que "hay espacio aún para la solución" y aseguró
que "los apoderados están dispuestos a conversar hoy mismo con los
dirigentes sindicales", sin embargo, aún no habría ninguna reunión agendada
entre las partes.
Además, el directivo señaló que la situación en la mina se
mantiene tranquila, ya que los trabajadores de los sindicatos en huelga Uno,
Dos y Tres no llegaron esta mañana a trabajar, mientras que sí lo hicieron los mineros
subscritos al sindicato minero, al sindicato número cinco, al sindicato de
supervisores y al sindicato "Radomiro Tomic".
Aunque Fernandois no especificó detalles de la propuesta
que la empresa realizará a los trabajadores, se conoce que será de un bono de $
6,5 millones y 3,8% de reajuste.