Industria

Los desafíos de Chile como el mayor exportador mundial en la industria de choritos

Pedro Ovalle, gerente comercial de St. Andrews, la principal empresa del sector, afirma que el país ya está llegando a su límite productivo.

Por: Martín Baeza | Publicado: Jueves 27 de abril de 2023 a las 10:20 hrs.
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Pedro Ovalle, gerente comercial de St. Andrews
Pedro Ovalle, gerente comercial de St. Andrews

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Es una industria de la cual no se tiene mucho conocimiento, pero Chile se ha alzado como el mayor exportador a nivel mundial de mejillón o chorito, como se le llama en el país. Asimismo, es el segundo principal productor detrás de China.

El crecimiento ha sido acelerado. De acuerdo a Mejillón de Chile, programa compartido entre actores de esta industria y del gobierno, los niveles de producción en el país subieron de unas 60 mil toneladas en 2003, a más de 425 mil toneladas en 2021. Ese año, dicen los datos del Banco Central, se exportaron 98 mil toneladas de producto terminado –el 95% correspondiente a congelados- por un total de más de US$ 271 millones.

Dentro de Chile, St. Andrews, filial de la pesquera y salmonera Blumar, es la empresa más grande del sector. Pedro Ovalle, gerente comercial de esta empresa, afirma que la industria está llegando a sus límites productivos, por lo que los desafíos del sector están orientados a “vender más y en nuevos mercados”.

Mejillón de Chile, de hecho, identifica como las brechas del sector los bajos niveles de crecimiento comercial en mercados internacionales y que la producción no se ajusta a la demanda internacional en cantidad y calidad.

Los desafíos

Ovalle relata que con St. Andrews llevan casi dos décadas en el mercado y partieron exportando hasta el 80% del total de la producción a Europa. “Italia, Francia y España son grandes conocedores del mejillón. Son mercados históricos, pero nosotros fuimos un poco más allá como empresa y como industria y fuimos exportando y buscando nuevos mercados”, dice.

Así, dice que Asia, Estados Unidos y Rusia se fueron abriendo como mercados importantes. De hecho, la importancia de Rusia es tal que, tras la invasión a Ucrania, hizo caer en cerca de un 6% las ventas de la industria a nivel global, señala Ovalle.

“En general, lo que creemos que necesitamos es seguir avanzando con mercados que puedan ser grandes (…) Estados Unidos nos compra hace muchos años como industria, pero el consumo per cápita sigue siendo sumamente bajo y por lo tanto queremos seguir presionando, mostrando el producto y sus bondades”, explica.

La producción, en tanto, estima que está casi al límite máximo, porque no hay permisos de cultivo disponibles para seguir sembrando. Asimismo, la industria se concentra en la Región de Los Lagos y, más al sur, se generan eventos de marea roja, lo que hace poco viable la industria del chorito.

St. Andrews, de hecho, concentra sus operaciones en Chiloé: tiene plantas de proceso en Quemchi y Chonchi y todos los centros están en esa región. En el extranjero, tienen una oficina en España y algunos agentes en otros mercados que funcionan como el brazo comercial de la empresa.

“No vemos en el corto plazo aumentar las producciones a nivel país. Yo diría que falta un poco para estar a full capacidad, pero sí vemos con muy buenos ojos que el producto se esté dando a conocer más todos los años. Cuando uno va a vender al mundo, el objetivo es agrandar la torta, no pelearse el cliente con la competencia. Y eso es lo que hemos hecho los últimos años (…) Hay espacio para percibir más”, proyecta Ovalle.

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