Empresas y Startups

Hay que "diferenciarse de las grandes empresas y no competir con ellas"

La política de Vantaz es no asesorar a empresas, sino a las personas que trabajan en empresas.

Por: Sebastián Valdenegro | Publicado: Jueves 3 de febrero de 2011 a las 05:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Buscábamos un dominio.com y estaban todos tomados, todas las palabras que se le ocurrieron al equipo no entraban. Un día un compañero se quedó hasta muy tarde en la noche mezclando nombres hasta que entró la palabra Vantaz... y así nacimos.

Eso fue en julio de 2000 y desde ahí la asesora Vantaz Group comenzó sus operaciones. Uno de sus socios fundadores, Juan Cariamo, recuerda que ingresar al mundo de las asesorías no fue fácil. Hubo mucho aprendizaje y muchas lecciones que aprender.

En un principio, este emprendedor Endeavor estaba acompañado sólo por los cuatro socios fundadores de Vantaz: Marcel Villegas, Mauro Mezzano, Patrick Hall y Andrés Medina, todos profesionales entre 20 y 30 años que pusieron en marcha el proyecto. En los emprendedores es gravitante ponerse de acuerdo temprano sin muchos intereses en la mesa, ponerse de acuerdo en lo mínimo y necesario y echarle para adelante, comenta Cariamo, quien puntualiza que recién cuando los proyectos muestran crecimientos se pueden tomar decisiones como estructuraciones, cuánto va a ganar cada uno, cómo nos vamos a organizar, etc. Según el psicólogo, el éxito inicial trajo las primeras responsabilidades, las cuales eran atendidas por los cinco socios, ya que la situación de la empresa aún no favorecía la contratación de más profesionales. Se hizo lo obvio, todas las oportunidades las resolvíamos nosotros, señala.

La naturaleza del medio favoreció la supervivencia de la compañía durante sus inicios, dado que en esta industria las barreras de entrada no son tan altas, no tienes que salir a comprar grandes equipos o instalar una gran fábrica, por lo cual el esfuerzo logístico no fue tan considerable.

Mayor proximidad

Sin dudas, destacar en un mercado tan saturado como el de las asesorías es complejo, más aún para una empresa recién establecida. Vantaz no era nadie en esa época, no significaba nada para nadie. Además, las grandes consultoras estaban muy bien estructuradas, recuerda Juan Cariamo.

Al respecto, el directivo señala que la picardía del emprendedor está en canalizar positivamente los desafíos del mercado y buscar la manera de diferenciarse de las grandes compañías en lugar de competir con ellas. Para esto es clave, dice, buscar nichos no explotados, como la pequeña y mediana empresa, donde apunta Vantaz.

Bajo este prisma crearon un estilo intermedio, caracterizado por no ser tan estructurado, tan caro ni tan complejo como las grandes asesoras, ni tan al dedillo como lo es una boutique. El concepto central de este paradigma es ser súper flexibles, acompañar a los clientes, dar un sello distinto de compromiso y vitalidad al trabajo. Mucha más proximidad. Nosotros acompañamos a nuestro cliente donde tenga un problema. Lo vital es la problemática que una persona coloca en la mesa, detalla Cariamo. De ahí que la política de Vantaz es no asesorar a empresas, sino a las personas que trabajan en empresas.

Crecimiento

Hoy, a casi once años de su fundación, la empresa cuenta con más de 50 trabajadores en cuatro áreas de cobertura: estrategia y gestión; servicios compartidos; cambio organizacional; y excelencia operacional y de negocios. Además, posee oficinas en Chile, Argentina y Australia.

La compañía tiene un plan súper agresivo de negocios para los próximos cinco años. Cariamo indica que en noviembre terminamos el plan que nos permitirá duplicarnos y abrir dos o tres líneas de servicios adicionales. Probablemente, vamos a abrir un par de países más. Nos focalizaremos en dos segmentos: el mundo minero y la consultoría de estrategia y transformación.

Política educacional

Con el plan de negocios listo, el ejecutivo se atreve a recomendar a los emprendedores aventurarse en el proyecto propio después de algunos años de trabajo, entre cuatro y cinco después de egresar de la universidad, en una empresa tradicional.

Cariamo afirma que encarar el emprendimiento con una poca experiencia laboral puede hacer el camino más pedregoso y más complicado, aunque tampoco, dice, debe esperarse mucho tiempo, ya que vienen más presiones familiares, por lo cual de ahí para adelante es difícil. El psicólogo destaca que ha habido un vuelco gigantesco en el emprendimiento en Chile, aunque considera que éste debe inculcarse desde pequeño, dado que ser un hombre de negocios se aprende temprano en la vida.

El emprendimiento no sólo tiene que ser una política que impulse la economía, sino también debiera ser una política de educación, concluye.

Lo más leído