La esperanza de contar con Internet a nivel satelital se mantiene viva pese a la renuncia de Facebook a ese proyecto que, en teoría, permitiría conectar las zonas más remotas e inaccesibles del planeta.
Un días después de ese anuncio, la compañía aeroespacial SpaceX, liderada por Elon Musk, pidió permiso al gobierno estadounidense para comenzar a probar un proyecto por el que se proporcionaría internet desde el espacio.
Según informó el Washington Post, el plan de la compañía contempla el lanzamiento de 4.000 satélites pequeños y baratos que transmitirían la señal a cualquier parte del mundo.
SpaceX fabrica y maneja los transbordadores espaciales de carga del mismo nombre que se acoplan a la Estación Espacial Internacional.
Las pruebas comenzarían en 2016 si es que la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, el regulador de telecomunicaciones) le da luz verde. Los ensayos pondrán a prueba las antenas de los satélites para concluir si son capaces de ofrecer internet de alta velocidad y sin interrupciones.