Por Claudia Betancourt M.
Siguiendo con el diseño implementado por La Moneda, en orden a impulsar un segundo semestre acelerando el envío de la agenda política, y de paso intentar destrabar la crisis por las demandas estudiantiles, ayer el presidente Sebastián Piñera, firmó dos proyectos de ley destinados a la descentralización del país. Estos son, una iniciativa que establece elección democrática y por sufragio universal de los Consejeros Regionales (Cores) y otra que apunta a transferir atribuciones del nivel central a los Gobiernos Regionales (GORE).
Respecto de la descentralización regional, la iniciativa busca fortalecer la gestión y autonomía de los GORE, destacándo el traspaso de competencia, funciones y programas desde los ministerios a esta institución. De esta manera, se plantea crear la figura de Administrador Regional y junto con ello, se establece que los cargos directivos de importancia, serán seleccionados mediante el Sistema de Alta Dirección Pública (ADP).
En términos financieros, el GORE será el responsable de aprobar el proyecto de presupuesto regional de inversiones.
Elección de Cores: el eterno compromiso político
Por una más de un década, estuvo presente -en todos los candidatos presidenciales- las promesas de una elección democrática de los Cores.Finalmente, y luego de múltiples reuniones encabezadas por el titular de la Segpres, Cristián Larroulet, el mandatario enviará prontamente al Congreso para su discusión la elección directa y por sufragio universal de las autoridades regionales. Uno de los puntos que se destaca de la medida, es que el Intendente ya no será quien presida el Consejo Regional, sino que será el consejero elegido entre sus pares con mayoría absoluta.
Para ello, se propone un sistema de representación proporcional, el mismo que se utiliza para la elección de los concejales, lo que permitirá la existencia de candidatos y cada uno de ellos podrá ser representado por uno o más partidos políticos.
Ello implica una autonomía de las regiones, según reveló el mandatario. “Esto implica un aumento significativo e histórico en autonomía de las regiones y un aumento en las atribuciones y competencias de los gobiernos regionales”, explicó.
De esta manera, el número de consejeros estará dado por la cantidad de habitantes de la región.
A modo de ejemplo, y según los datos aportados en el Censo 2002, las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Atacama, Aysén, Magallanes y Los Ríos, tendrán 14 consejeros. En el caso Antofagasta, Coquimbo, O’Higgins y Los Lagos, 16 serán los cupos para elegir. Las regiones del Maule y La Araucanía, con 20 consejeros; para Valparaíso y Biobío, 28 consejeros y finalmente, para la Metropolitana 34 consejeros.
Con lo anterior, se pasa de 268 consejeros actuales a 278 con la propuesta.