Los ingresos para el segundo trimestre de este año del fabricante de juguetes Hasbro crecieron un 10% a US$ 878,9 millones, impulsados por ventas de las muñecas de princesas y figuras de Frozen de Disney, así como los ejemplares de Star Wars.
El alza más grande fue en los productos destinados a niñas –hasta 39%– dentro de las que destacan Elsa, la heroína de Frozen, y las tradicionales Cenicienta y Blancanieves. Hasbro se quedó con los derechos de su rival Mattel para elaborar estas piezas, desde el primero de enero de 2016, tras un acuerdo con Disney.
“El enfoque de Hasbro de forjar marcas, contar grandes historias y crear las mejores experiencias en juguetes, juegos y productos de consumo está impulsando una fuerte demanda del consumidor y tiendas por nuestras marcas en el mundo”, dijo Brian Goldner, director ejecutivo de la firma.
Sin embargo, las acciones cayeron ayer 7,5% ante la preocupación por el futuro del mercado para niños, mientras la compañía prepara una nueva línea sobre La Guerra de Las Galaxias, para esta Navidad. Analistas creen que Hasbro no será capaz de tener el mismo impulso en las ventas que las generadas por la película anterior de la saga, una de las más taquilleras de la historia.
Las ventas de juguetes para niños, el mayor mercado del grupo y que representa el 40% del negocio, subieron sólo un 6% frente al alza de dos dígitos del trimestre anterior. Sin ayuda del estreno de la película, los juguetes Transformers cayeron 20% y mucho más los relacionados a Jurassic Park.
