"Hace un año en mi primera conferencia de prensa les anuncié el fin del cepo y en ésta, mi última conferencia como ministro, del éxito del blanqueo", destacó ayer el ministro saliente de Hacienda y Finanzas de Argentina, Alfonso Prat-Gay.
El funcionario, quien dejará el puesto en manos de Nicolás Dujovne y Luis Caputo a partir de enero, aseguró que sale del cargo a partir de enero con la "sensación de misión cumplida. Dejamos el auto preparado".
Prat-Gay aseguró que este año se logrará cumplir la meta de un déficit fiscal de 4,8%, un nivel que aún consideró "alto", debido al "desorden económico" heredado de la gestión anterior, que lideraba Cristina Fernández de Kirchner.
"Hay que ir bajando gradualmente", sentenció y agregó que "cumplimos con la meta de déficit a pesar de la recesión y cumplimos a pesar de ser minoría en el Congreso, donde la negociación de leyes a la que estamos obligados nos generó en ocasiones más déficit del que teníamos previsto".
La autoridad también celebró el fin del límite al intercambio de divisas y el acuerdo con los tenedores de bonos, que permitió sacar al país del default.
"Sin el acuerdo con los holdouts hubiera sido imposible tener una estrategia de inserción en el mundo", sostuvo. Detalló que "este año teníamos servicios de deuda por US$ 50.000 millones, deuda que no contrajimos nosotros. Si no recuperábamos el acceso al financiamiento no hubiéramos podido realizar en forma gradual la reducción del déficit y no había margen político ni social para hacerlo todo de golpe".
Éxito del blanqueo
El ministro saliente anunció que la amnistía tributaria decretada para permitir la repatriación de capitales iniciada durante su gestión acumula hasta la fecha una cifra de US$ 90.000 millones, o 1,33 billones (millones de millones) de pesos argentinos, a través de 235 mil declaraciones juradas. Calificó la cifra como "un éxito de este equipo de gobierno y un logro de un cambio cultural del argentino medio que quiere hacer las cosas de otra manera".
El ministro saliente detalló que "se recaudaron por penalidades en el blanqueo 82.000 millones de pesos. Esto supera las expectativas de los más optimistas y es una señal que la situación está cambiando. En el último intento de blanqueo bajo el gobierno de Cristina Kirchner se declararon US$ 2.600 millones, es decir que ahora ya se exteriorizaron 35 veces más activos. Si esto no es una prueba contundente de la confianza en el país, en el recaudador, en el presidente Macri, qué otra cosa es".
Prat-Gay comparó el nivel de recaudación con el de Brasil y Chile. En la mayor economía latinoamericana, dijo, "se declararon US$ 52.500 millones: estamos duplicando lo que consiguió Brasil siendo una economía más grande que la nuestra. Y multiplicamos por cinco a Chile. Esto ha sido un éxito indiscutible, el más importante de la historia y está en el ranking de los más importantes del mundo".