Los principales indicadores de los mercados del viejo continente cerraron a la baja pese a positivos datos macroeconómicos en Estados Unidos. Todo en medio de la tensa situación externa en China y Ucrania.
El gigante asiático dio nuevamente síntomas de desaceleración en su crecimiento, ya que tanto el dato de producción industrial como el de ventas minoristas se quedó por debajo de lo esperado.
Los inversionistas tampoco pierden de vista las noticias sobre la disputa entre Ucrania y Rusia, tensión geopolítica que se podría agravar con la ocupación de tropas del gobierno de Vladimir Putin.
Junto a ello, las ventas minoristas en EEUU aumentaron una décima más de lo esperado, luego que experimentara un crecimiento durante febrero por primera vez en tres meses, al registrar un repunte del 0,3%, superior incluso al 0,2% esperado por los analistas. Además, el dato de desempleo semanal en ese país registró una inesperada mejora, ya que se alcanzaron las 315.000 solicitudes, sus mínimos de tres meses, mejorando las 330.000 proyectadas por los analistas.
En ese escenario, el DAX de Frankfurt lideró las caídas al conseguir las 9.017,79 unidades al retroceder un 1,86%, seguido por el CAC 40 de París que descendió un 1,29%, hasta los 4.250,51 enteros.
Por su parte, IBEX de Madrid que cedió un 1,19%, logrando los 9.950,30 puntos y el FTSE 100 de Londres bajó un 1,01%, llegando a las 6.553,78 unidades.
Un poco más atrás, se ubicó el FTSE MIB de Milán que perdió un 0,91%.