por d. vásquez/s. valdenegro
Más de dos meses en La Moneda lleva Michelle Bachelet, período intenso en el que el Ejecutivo ha trabajado contrarreloj para sacar adelante su agenda de reformas enfocadas en reducir la desigualdad y repuntar el crecimiento de la economía. Y las iniciativas ligadas a sectores económicos ya se han anunciado: la reforma tributaria y las agendas de Energía y Crecimiento, Innovación y Productividad.
La reforma tributaria pasó a segundo trámite constitucional y se apresta a ser discutida en la comisión de Hacienda del Senado el próximo 2 de junio. Y aunque el debate dista de acabar, sus eventuales efectos han tenido eco en la bolsa local.
Las reacciones se focalizaron en las empresas afectadas por los cambios en impuestos específicos, como el nuevo gravamen a las bebidas azucaradas, el término a la franquicia del IVA a la construcción de viviendas y el aumento a las bebidas alcohólicas y al impuesto de timbres y estampillas.
Construcción en rojo
A más de un mes de aquello, construcción es el único sector que no logró recuperarse en la bolsa, mientras que consumo y utilities lograron paliar la compleja discusión en la Cámara. El sector banca, en tanto, se vio positivamente influida por las reformas.
En el primer caso, las acciones se han visto afectadas adicionalmente por su mayor sensibilidad al ciclo económico, y se están resintiendo por la desaceleración de la actividad y la baja en la inversión.
Así, el subíndice construcción cede 9,58% en el año, del cual un 7,25% se arrastra desde el día del anuncio de la reforma. El mayor impacto por el proyecto según los analistas es el fin del FUT, pues el sector cuenta con altos requerimientos de capital y bajos rendimientos de los dividendos.
Bancos al alza
Los papeles del sector banca, en cambio, se han visto beneficiados en la bolsa con el incremento del impuesto de timbres y estampillas, que pasaría de 0,4% a 0,8% y que grava los créditos de consumo e hipotecarios.
Desde el 31 de marzo, el índice respectivo es el de mejor desempeño entre los cuatro que han reaccionado a las reformas de Bachelet, destacando los retornos de Santander (12%), Chile (8%) y BCI y CorpBanca (ambos en torno a 5%). Además del gravamen, el alto IPC acumulado en el año -sobre 2%- también ha impulsado el rendimiento bursátil del sector.
Consumo repunta
Las acciones del sector consumo lograron sortear los baches iniciales tras el anuncio de la reforma -en parte por las indicaciones que suavizaron el alza en el impuesto a alcoholes-, consiguiendo subir su rentabilidad en 7,55% desde el anuncio de la misma.
Pese a esto, departamentos de Estudios se mostraron cautelosos respecto a si dicha iniciativa restará presión a las acciones más afectadas por la medida: CCU, Embonor-B y Andina-B. Todos los papeles cerraron abril con avances, pero CCU y Andina B han cedido en mayo, lo que coincide con el menor crecimiento en el consumo que han mostrado los últimos datos macroeconómicos.
Efectos a largo plazo
Tras la reforma energética anunciada el jueves, el mercado prevé efectos positivos para el sector en general y también para empresas en particular, pero más bien en el largo plazo, en línea con lo que demore concretar los proyectos. “En el caso de AES Gener y Colbún, es positivo que el gobierno intente darles más opciones de acceso a GNL. Sin embargo, hasta que no tengan el gas oficialmente, no creo que el mercado incorpore un aumento en la generación eficiente de estas compañías”, dijo Andrés Ossa, analista de IM Trust Credicorp Capital.
