La renta fija chilena está viendo un boom de colocaciones gracias al regreso de la tríada de institucionales que da vida a este mercado: Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), compañías de seguros y fondos mutuos.
Estos son una pieza clave en la fórmula que desató una llamativa ola de operaciones, tomando en cuenta que el pasado viernes CMPC hizo historia con un bono híbrido, el miércoles Engie Chile colocó su primer título en suelo nacional y Bodenor Flexcenter debutó en el mercado, mientras que el jueves Esval colocó el primer bono azul del sector privado chileno.
La acción no se detuvo este viernes, ya que Inmobiliaria Mall Viña del Mar levantó UF 1,5 millones con un bono a 2031 que logró un "extraordinario" ratio de sobredemanda de tres veces, según dijo a DF Gonzalo Covarrubias de Link Capital Partners, firma que participó en esta colocación.
Además, si bien los bancos habitualmente salen a colocar bonos, el Banco de Chile llamó la atención al fondearse hoy con UF 5 millones a través de un remate holandés, proceso en que el subastador comienza con un precio alto y lo va bajando gradualmente hasta que un participante está dispuesto a aceptar el precio actual.
"Los resultados fueron bien exitosos", dijo a DF el cientista de datos de Portfolio Analytics en Principal, Cristóbal Valdivia, a propósito de esta movida semana de colocaciones. "Un porcentaje alto de estas colocaciones fueron públicas, mediante remate holandés, y se fueron a muy buenas tasas en línea con lo que transaban en el mercado secundario mismo rating/emisor. Los spreads están más apretados, respecto a lo que vivimos postpandemia, pero aún siguen atractivos respecto a los niveles antes de la crisis. Hemos visto harto apetito por este tipo de activos, y esto se ha visto reflejado en la demanda reciente por este tipo de colocaciones".
Vuelven los tres
¿Qué está pasando? "Los tres grandes inversionistas del mercado local han vuelto a comprar fuerte, haciendo que bajen las tasas de interés y los spreads, e incentivando a muchos emisores a salir nuevamente con colocaciones", destacó Covarrubias. Según el socio Link Capital, el fenómeno está relacionado con el repunte inflacionario de julio y su efecto positivo sobre la demanda de bonos en UF, lo que empujó a los fondos mutuos de renta fija a salir de compras.
También apuntó a la proximidad del Chile Day en Londres -que comienza el próximo viernes- y las Fiestas Patrias, con un mercado estacionalmente menos líquido, y que en esta ocasión además precede a las elecciones de noviembre. "Las empresas prefirieron aumentar sus emisiones ahora, antes que llegar con incertidumbre política de vuelta del 18", afirmó Covarrubias.
En invierno ya se empezaban a respirar nuevos aires, pues julio trajo una revancha de las colocaciones en pesos, primero de la financiera automotriz BK y poco después de la Caja Los Andes. Esto marcó un regreso de las financieras no bancarias a los bonos nominales a través de remate holandés.
"Las empresas han emitido mayoritariamente para refinanciar sus deudas de corto plazo. Las principales variables macroeconómicas a nivel local ya están bien estabilizadas, inflación convergiendo al rango meta del Banco Central, crecimiento económico con una brecha acotada respecto al potencial, y el espacio para mayores bajas en Tasa Política Monetaria, sujetas a lo que haga la Reserva Federal en Estados Unidos", observó Valdivia.
Y estimó que las emisiones corporativas para financiar Capex serán más frecuentes una vez se limpie la incertidumbre política de las elecciones locales a fines de este año y comienzos del próximo.
Son noticias positivas después de que a partir del estallido social de 2019 los fondos mutuos de renta fija sufrieron un importante drenaje, pasando de administrar US$ 40 mil millones a sólo US$ 18 mil millones. Por su parte, las AFP sufrieron los efectos de los retiros de los fondos previsionales, y las aseguradoras prefirieron comprar afuera en el contexto de tasas estadounidenses muy altas que vino en los años siguientes a la pandemia.
Pero las cosas han cambiado. "Los fondos mutuos, con la baja en las tasas de los depósitos, volvieron a recibir muchos flujos y ya están nuevamente manejando los mismos US$ 40 mil millones que tenían antes del estallido. Las AFP, con la reforma de pensiones y el tema más solucionado han vuelto a invertir muy fuerte en Chile, y las compañías de seguros también volvieron con la baja de tasas en el país", destacó Covarrubias.
Empresas chilenas también han colocado bonos en el exterior esta semana. CMPC recaudó US$ 600 millones con deuda a 32 años el jueves en EEUU, un día después de que Colbún se embolsó US$ 500 millones con un título a 2035 en ese mismo mercado.