Una federación de centro. Esta es la máxima con la que el Partido Regionalista Independiente (PRI) se encuentra trabajando durante estos días, una alianza que abrace tanto a movimientos y partidos que adhieren al centro político. Un propósito que la tienda de Chile Vamos ve clave para un futuro gobierno de Sebastián Piñera.
No obstante, el conglomerado primero debe evitar su disolución, por lo que durante hoy oficializará sus intenciones de fusionarse con Democracia Regional Patagónica.
Lo anterior, debido a que el PRI tras no conseguir el mínimo de votos exigidos por ley en la pasada parlamentaria (5% en tres regiones continuas u ocho discontinuas), arriesga perder su calidad de partido legal y ser disuelto.
De esta manera, la tienda liderada por Alejandra Bravo, se reunirá hoy para unir ambos partidos, el que según cuentan fuentes al interior del PRI, se mantendría presidido por Bravo, mientras que el puesto de secretario regional, que en el PRI es ejercido por Eduardo Salas, pasaría a ser desempeñado por alguien de la directiva de Democracia Regional Patagónica.
Conocedores de las conversaciones entre ambos partidos creen que el cargo podría recaer en Carlos Pérez Osorio, quien ejerce actualmente como secretario general de Democracia Regional Patagónica y quien además postuló al Senado por la región de Aysén en las pasadas elecciones, obteniendo 272 votos (o,8%).
De esta manera, ambas tiendas juntarían los 21 mil militantes del PRI con los cinco mil de Democracia Regional Patagónica.
Salas explica que entre ambos partidos existen múltiples coincidencias en sus lineamientos, tales como su visión en la democracia, su juicio a la dictadura, su respeto a los derechos humanos, el regionalismo y el rol del Estado.
Ante esto el secretario general del PRI afirma que esta fusión parte de una base en que “un discurso muy conservador no atrae, no genera adhesión, y nosotros creemos que esta es una oportunidad de lo que nos ha dicho la sociedad”.
La convocatoria de centro
Parte de la agenda del Partido Regionalista Independiente es comenzar una serie de conversaciones con distintos sectores cercanos al centro político, por lo que ayer se reunió con Álvaro Clarke y Mario Jerez, ambos profesionales pertenecientes a la corriente de Progresismo con Progreso de la Democracia Cristiana y que cumplieron con roles en los distintos gobiernos de la Concertación.
Salas expresa que esta reunión nace de “la necesidad de que los actores de centro confluyan en este tiempo” y que el PRI desea “potenciar esa línea”.
En ese mismo sentido, el excandidato a diputado ve que “el gobierno de Sebastián Piñera va a estar orientado hacia el crecimiento, el progreso social y las reformas, y de esa perspectiva encontrarnos con gente que está pensando de forma similar es muy importante”.
Para profundizar esto concordaron hacer un “seminario en conjunto para tratar temas de la economía y el rol del Estado”, en la línea de que el Progresismo con Progreso ha impulsado ideas tales como la del “Estado más capaz”.
Sin embargo, fuentes al interior de Progresismo con Progreso afirman que el almuerzo con dirigentes del PRI de los adherentes a la corriente falangista liderado por Mariana Aylwin se realizó por motivos de amistad, y que “darle otra lectura a este encuentro no le correspondía”.
No obstante del PRI aseguran que extenderán sus conversaciones a sectores de centro tales como Ciudadanos y Amplitud.