La Encuesta de Expectativas Económicas (EEE) de junio trajo consigo un repunte en la proyección de crecimiento para 2025. Los académicos, consultores y ejecutivos de instituciones financieras sondeados por el Banco Central mejoraron sus cálculos para el Producto Interno Bruto (PIB) de 2% a 2,2%.
Esto, en un escenario en que el pronóstico para la Formación bruta de capital fijo (FBCF) se mantuvo en 3% y el de consumo de hogares en 2,1%. En paralelo, la mirada para el trimestre calendario de la encuesta pasó de 2,5% a 2,9%.
Lo último se basó en que el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) registraría una expansión de 3,1% en 12 meses en mayo.
De cara a 2026, el PIB avanzaría 2% y un 2,1% en el ejercicio siguiente.

El economista jefe para Chile de Credicorp Capital, Samuel Carrasco, atribuyó la mejora sobre el Producto a las perspectivas de inversión en los sectores minero y energético, un consumo favorecido por efectos transitorios, un sector exportador que se mantiene dinámico pese a la incertidumbre externa y a términos de intercambio favorables.
El economista jefe de Fynsa, Nathan Pincheira, afirmó que el mercado tuvo un giro optimista debido a las cifras más positivas del primer trimestre, sumado a la leve sorpresa en el Imacec de abril.
“Cuando se realizó la EEE de mayo, solo se contaba con indicadores mensuales de actividad a partir de los cuales se anticipaba una expansión de 2% anual. Sin embargo, con la publicación de Cuentas Nacionales, esta cifra se corrigió hacia 2,3% anual”, complementó la economista del Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales (OCEC-UDP), Valentina Apablaza.
El decano de la Facultad de Administración y Negocios de la Universidad Autónoma, Rodrigo Montero, apuntó al factor de precios internos. “Vemos una economía que sigue en un proceso de convergencia inflacionaria, que da espacio para continuar con el proceso de normalización monetaria, que llevaría a la Tasa de Política Monetaria (TPM) a un 4,5% en diciembre”, mencionó.
De todas formas, el 2,2% es un pronóstico muy similar al punto medio de lo que prevé el ente emisor (1,75% a 2,75%), rango que probablemente revisará el próximo miércoles al presentar un nuevo Informe de Política Monetaria (IPoM).
La mirada externa
La EEE coincidió con el informe de proyecciones del Banco Mundial, que redujo el PIB de Chile desde 2,2% de enero a 2,1% en 2025.
Para el próximo año mantuvo su pronóstico de 2,2% y 2,1% en 2027.
Esto difiere de las últimas proyecciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) de 2,4% para el actual ejercicio y está por encima del 2% del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Pese a las dificultades económicas de este año, el reporte esboza que se espera que Latinoamérica se recupere debido a una disminución de la inflación y una consolidación fiscal exitosa. Sin embargo, quedan factores internacionales que influirán en su desempeño.
Entre los principales riesgos, mencionó una desaceleración más pronunciada de lo previsto en el crecimiento de Estados Unidos, mientras que una menor expansión en China podría reducir la demanda de productos básicos, especialmente cobre de Chile y Perú, que es un importante insumo para el sector de energía renovable de China.
No hay recortes aún
La EEE también reveló que los analistas consultados por el ente autónomo apuestan porque el Consejo del Central mantenga la tasa de interés de política monetaria (TPM) en 5% en las próximas dos reuniones.
Ante ello, el tipo rector cerraría el año en 4,5%, en un escenario en que la inflación a diciembre sería de 4%. Ya para el final de 2026 se ubicaría en la meta de 3%.
En el corto plazo, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) presentaría una nula variación mensual en junio y de 0,4% en julio.
Para el tipo de cambio, dentro de dos meses se espera que se ubique en $ 933 para luego bajar a $ 927,5 en 11 meses. El sondeo previo veía a la divisa norteamericana en $ 940 en dos meses.