Esta vez, no fue consecuencia por los cortes de electricidad del invierno pasado o el apagón del 25 de febrero. Tras fiscalizaciones en terreno recientes, la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) formuló cargos contra Enel Distribución tras constatar que la compañía no habría cumplido con la instrucción impartida por el organismo para garantizar que todos los pacientes electrodependientes inscritos cuenten con sistemas de respaldo energético en sus hogares.
Durante la fiscalización realizada por la entidad fiscalizadora, en distintas comunas de la Región Metropolitana, la SEC indica que se comprobó que Enel no habría entregado estos sistemas de respaldo de manera permanente a un grupo de pacientes registrados, incumpliendo así las obligaciones que le fueron instruidas por la autoridad energética.
La normativa vigente exige a las empresas distribuidoras de electricidad implementar soluciones eficaces y oportunas que permitan asegurar el funcionamiento continuo de los dispositivos médicos de quienes dependen de ellos para vivir. Estas deben contemplar el equipamiento necesario para hacer frente a eventuales interrupciones del suministro eléctrico, especialmente en contextos de emergencia o contingencia.
Enel Distribución cuenta ahora con un plazo para presentar sus descargos ante la SEC. Mientras, la Superintendencia reiteró su llamado a todas las empresas del sector eléctrico a cumplir con sus obligaciones hacia las personas electrodependientes, especialmente en lo que respeta a medidas de respaldo que permitan enfrentar cortes de suministro sin poner en riesgo la vida de los usuarios.
"Seguiremos fiscalizando a distribuidoras"
En un comunicado, la superintendenta de la SEC, Marta Cabeza, afirmó que "como organismo fiscalizador, no vamos a permitir que se vulneren los derechos de quienes más requieren protección. Las personas electrodependientes necesitan contar con un suministro continuo y seguro, pero además deben tener garantizado un respaldo eléctrico que les permita mantener sus tratamientos, su calidad de vida y, en muchos casos, su salud y su vida misma".
La autoridad agregó que "seguiremos fiscalizando de manera rigurosa y permanente a las empresas distribuidoras, para que cumplan con su responsabilidad de proteger a estos usuarios. La energía eléctrica, en estos casos, no es solo un servicio: es un derecho esencial vinculado al bienestar de las personas".