El directorio de la minera Freeport-McMoRan entregó lo que fue interpretado como una señal de recuperación al mercado y decidió reestablecer los dividendos en efectivo a sus accionistas, luego de una suspensión de tres años.
Richard Adkerson, presidente de la compañía, señaló que esta decisión “refleja una sólida ejecución del plan para fortalecer la posición financiera de Freeport durante los últimos dos años, y también mejores condiciones y perspectivas de mercado para la generación de flujos de efectivo”.
La intención del directorio sería declarar un dividendo trimestral de US$ 0,05 por acción. El pago correspondiente al primer trimestre se produciría el primero de mayo de este año.
“Esperamos continuar fortaleciendo nuestro balance general, mantener un enfoque disciplinado en la inversión de proyectos en crecimiento que sean atractivos –a medida de que las condiciones económicas lo justifiquen- y proporcionar retornos monetarios a los accionistas”, agregó Adkerson.
La compañía señaló que la declaración y pago de los dividendos “están suscritos a las decisiones del directorio y dependerán de los resultados financieros, necesidades de efectivo, prospectos futuros y otros factores relevantes para la compañía”.
A inicios de diciembre de 2015, Freeport suspendió los dividendos de US$ 0,20 durante la crisis de deuda que enfrentaba ese año, con la esperanza de recaudar fondos y hacer frente a la baja del precio del cobre y los commodities en general.