La canciller alemana, Angela Merkel,
anunció hoy que la decisión acerca de una posible garantía estatal
para el fabricante de automóviles Opel se tomará antes de Navidad,
tras analizar la difícil situación de la empresa debido a los
problemas del consorcio matriz General Motors.
"Se trata de una garantía estatal que asegure a medio plazo la
liquidez", explicó Merkel ante la prensa tras una reunión con la
cúpula de Opel.
Merkel, además, explicó que todos los participantes en la reunión
coincidieron que, para que haya ayuda del Estado, se tiene que
asegurar que los medios que se destinen permanezcan en Alemania y no
sean devorados por el consorcio matriz.
Opel asegura no tener problemas de liquidez a corto plazo pero la
cúpula considera su obligación tomar precauciones para el caso de
que la situación de General Motors lleve a Opel a tener
complicaciones a medio plazo.
La garantía estatal estaría en torno a los 1.000 millones de
euros.
De parte de Opel, participaron en la reunión el consejero
delegado, Hans Demant, el director de General Motors para Europa,
Carl-Peter Forster, y el presidente del Comité de Empresa, Klaus
Franz.
Merkel, por su parte, estuvo acompañada por sus ministros de
Finanzas, Peer Steinbrück, y de Economía, Michael Glos.