El presidente Barack Obama pidió al Congreso que dé a Puerto Rico amplios poderes para reducir su deuda de US$ 73 mil millones acogiéndose a protección por quiebra, en momentos en que se agota su acceso a la liquidez. La noticia empujó los bonos de la isla caribeña a mínimos desde agosto.
Puerto Rico recibiría acceso a una forma de protección de bancarrota hasta el momento no disponible para los territorios estadounidenses. Oficiales de la administración también pidieron a los legisladores aumentar el financiamiento para salud de Puerto Rico, extender créditos fiscales a los pobres y establecer supervisión independiente para monitorear el presupuesto del gobierno.
“La deuda es insostenible, y el mercado lo sabe”, dijo a Bloomberg Antonio Weiss, consejero del secretario del Tesoro estadounidense Jacob J. Lew.
Las propuestas sugieren que la crisis ha llegado al punto en que las autoridades federales, que habían prometido no ampliar el plan de rescate financiero, no pueden esperar a que la ciudadanía y los acreedores lleguen a un compromiso después de que las conversaciones se rompieran el miércoles. Las propuestas tendrán que hacer frente a la resistencia en el Congreso, donde los republicanos han bloqueado el proyecto de ley que extendería los poderes de quiebra más limitados de la isla. La senadora de Alaska Lisa Murkowski, presidenta del Comité de Energía y Recursos Naturales del Senado, dijo que los legisladores necesitan más datos sobre la situación financiera de Puerto Rico antes de ayudar a la isla.
Estos cambios “van a ser extremadamente difíciles de conseguir a través tanto del Congreso de Estados Unidos como de la legislatura de Puerto Rico”, dijo a Bloomberg Matt Fabian, socio de Municipal Market Analytics con sede en Massachusetts. “Este Congreso no ha hecho casi nada. Por lo que esperar que consigan algo controvertido a petición de la administración justo antes de una elección es difícil”.
Años de endeudamiento
Puerto Rico se tambalea bajo la deuda acumulada de años de préstamos cuando la economía no creció y los residentes se fueron a la parte continental de EEUU. El gobernador Alejandro García está tratando de convencer a los inversionistas de aceptar menos dinero de lo que se les debe, diciendo que el alza de impuestos y recortes de gasto no serán suficiente para eliminar el déficit presupuestario del gobierno.
Los tenedores de bonos reclaman que el país debería tratar de mejorar la eficiencia del gobierno antes de forzar pérdidas a los inversionistas.