El peor inicio de año de la historia del S&P 500, así se puede calificar estas dos primeras semanas para el índice bursátil norteamericano, el cual registró una caída de 8%.
Lo anterior se traduce en que durante dicho periodo el indicador ha tenido una pérdida bursátil de US$ 1,5 billones, siendo las empresas de finanzas y tecnológicas las principales perjudicadas.
El índice de referencia de Estados Unidos se encuentra ahora en su nivel más bajo desde agosto y mañana, cuando se vuelva al ruedo tras el feriado del lunes, los inversionistas se enfrentarán a una serie de datos macroeconómicos y ganancias empresariales, lo que marcará si el mal inicio de año para el selectivo continuará o no.
Lo que viene para el índice
Durante estas dos semanas tanto la bolsa norteamericana como toda la renta variable en el mundo ha estado marcada por la incertidumbre que genera la economía china, así como las constantes bajas en el precio del petróleo que golpea las perspectivas de las empresas estadounidenses.
“Pese a la debilidad no esperada que se registró a comienzos de enero, ésta no ha violado los niveles de octubre de 2014 o los de agosto de 2015. La naturaleza del ciclo en curso preocupa cuando miramos las proyecciones a largo plazo”, explica Jason Hunter, analista de renta variable de JPMorgan.
Con la base de los 1.870 puntos en mente, otros bancos de inversiones, como Bank of America Merrill Lynch, consideran que si se perdieran dichos niveles, la tendencia mira a los 1.600 puntos como el próximo punto de equilibrio. “Cíclicamente existe el riesgo de entrar en un mercado bajista si perdemos los 1.867 puntos, pero desde un punto de vista secular, tenemos que mantener el espíritu alcista”, sostiene el analista de la entidad Stephen Suttmeier.
Nikkei en mercado bajista
Mientras, al otro lado del pacífico, la bolsa japonesa entró en un mercado bajista (al caer más de un 20% desde su último peak), apoyado por la ola de ventas que ha afectado en las últimas semanas a los mercados globales, siendo golpeado en gran parte por la caída que han tenido el mercado de acciones de China.
La renta variable japonesa también han sido presionada después de que la Reserva Federal de Estados Unidos elevara las tasas de interés el mes pasado.
Con todo, ayer el Nikkei cayó 1,12%, bajando, de esta forma, un 20% desde junio del año pasado.
