El indicador de volatilidad VIX nuevamente cerró al alza, llegando hasta los 45,45 puntos, su nivel más alto desde el 8 de agosto de este año, cuando las bolsas reaccionaron negativamente ante la rebaja en la calificación crediticia de EEUU.
Los positivos datos del PMI oficial de China y del ISM de EEUU no lograron cautivar al mercado internacional, que marcó retrocesos en las bolsas más importantes del mundo, luego que el plan de ajustes del gasto en Grecia no convenciera a los inversionistas.
“Pareciera que hay que esperar la resolución en Europa o, en su defecto, una serie de buenos datos económicos que descarten recesión… Sólo así el mercado se tranquilizará”, señala el gerente de renta variable internacional de Penta, Patricio Eskenazi.
En Wall Street el sector financiero lideró las pérdidas del día, con Bank of America registrando una caída de 9,6% llegando a su nivel más bajo desde marzo de 2009. El Dow Jones retrocedió en un 2,36%, mientras que el S&P 500 marcó -2,85%.
En Europa, los índices también registraron caídas. El Euro Stoxx 50, que agrupa a las principales compañías del Viejo Continente, terminó cayendo 1,9%, perdiendo terreno por tercer día consecutivo.
La demanda por bonos del Tesoro también aumentó, llevando al tramo de 10 años a caer debajo del 1,8% al cierre.