Opinión

La columna de J.J.Jinks: Hanlon y su navaja
Los conspiranoicos piensan que no fue una inadvertencia brutal, sino un plan para que el Estado comprara la casa de Allende, pese a la prohibición Constitucional. Pero más bien parece un candidato perfecto para ejemplificar la navaja de Hanlon: nunca atribuyas a la maldad lo que se explica adecuadamente por la estupidez.

La columna de J.J.Jinks: Compro casas, tratar aquí
Pepe (Donoso) tiene que haber sonreído socarronamente cuando se enteró de que el Gobierno anunció que había comprado las casas de Aylwin y Allende a sus parientes para transformarlas en museos que alberguen sus recuerdos y legados. La decisión no deja de ser curiosa.